Llegué al Puertillo a las 7 de la mañana y aún no se distinguía bien cómo estaba el mar debido a la oscuridad. También me dió igual. Dejé al perro y al agua...
Con la claridad empecé a distinguir olas perfectas pequeñas para mí solo. Dos horas sin nadie. A los que se lo conté, no me creyeron. También me dió igual.
Al terminar y con la marea "casi seca", a las 10:30 de la mañana, hice estas fotos. Aún no había nadie. Qué raro...
4 comentarios:
Zorrón !!
;)
Mandi.
No hay nada como madrugar y encontrarte un sorpresón asi.
Saludos desde Asturias, te enlazo en mi blog y sigo el tuyo.
Sorpresas que se lleva uno, eh?
Muchas gracias!
Pues yo te pongo un enlace igualmente!
Un abrazo.
Mandi.
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